Tener afasia es una experiencia impactante a la que puedes reaccionar de distintas maneras por los cambios que se presentan en tu vida. Posiblemente te sientes frustrado, alterado, impaciente, triste o asustado, porque es muy difícil comunicar lo que sientes y lo que piensas. Es natural reaccionar así.
Algunas sugerencias de lo que puedes hacer es:
Asistir a terapias de rehabilitación
De lenguaje, física y en caso necesario y recibir apoyo psicológico. En la terapia de lenguaje mejorarás tus habilidades comunicativas; en la terapia física podrás mejorar tus capacidades motoras, y en la terapia psicológica recibirás apoyo emocional para enfrentar tu nueva vida.
Involucrar a tus familiares y amigos
Contar con el apoyo de las personas que te rodean es clave para lograr la adaptación y mejoría.
La recuperación es un proceso que puede ser lento
Recuerda que en la gran mayoría de los casos, es posible observar avances incluso años después de haber adquirido afasia.
¡Ten paciencia!
Haz lo posible por mantener el ánimo.
Verifica que te hayan entendido
Cuando quieras comunicarte con los demás, verifica que te hayan entendido , toma en cuenta de qué manera puedes ser más claro al hablar; por ejemplo, hablando lentamente o repitiendo las cosas. Otra estrategia útil es utilizar gestos, dibujos o escribir lo que quieres comunicar.
Trata de realizar actividades
Intenta que sean recreativas y practica tus pasatiempos. Puedes incluso descubrir habilidades nuevas, tales como pintar, cantar, jardinería o cocinar.
No dudes
Tu personalidad e inteligencia siguen intactas, la afasia afecta únicamente tu habilidad para comunicarte.
Escrito por: Beatriz González Ortuño y Paola González Lázaro